Encuentros interinstitucionales de este tipo se habían iniciado en el año 2016, más luego, y en función de los recambios funcionales habidos en dicha área del Poder Ejecutivo, los mismos se discontinuaron; y habiendo arrojado aquellos buenos frutos y a instancias de integrantes del Fuero de Familia de la Segunda Circunscripción Judicial, se impulsó la reanudación de los mismos.
Barotto señaló la multiplicidad de casos que son sometidos a decisión del Poder Judicial en situaciones en que se presentan afectaciones de derechos de niñas, niños y adolescentes -inclusive como derivación de situaciones de violencia familiar o de género-, y reconoció el “enorme esfuerzo” y la “sensibilidad” con que esa problemática es abordada por quienes cumplen funciones en el fuero de Familia, tanto en el ámbito jurisdiccional como del Ministerio Público.
El juez del STJ recordó además que el incremento sostenido de la demanda del accionar de los Juzgados de Familia derivó en la creación de nuevos organismos y secretarias en la estructura del Fuero, a lo que se agrega la iniciativa legislativa presentada por el Superior Tribunal de Justicia ante la Legislatura provincial, a través de la Acordada Nº 14/2017, por la cual se solicitó la instauración de más Juzgados de Familia en las Circunscripciones Judiciales Segunda y Cuarta.
La Ley 5238, sancionada en octubre de 2017, asigna a la Senaf, entre otras funciones, la de “entender en todo lo atinente a la protección integral de derechos de las niñas, los niños y los adolescentes en el territorio de la provincia”, así como “entender en las relaciones institucionales con el Poder Judicial y la Procuración, y en particular con los Juzgados de Familia y la Defensoría General, en todo lo referente a la protección, garantía y aplicación de los derechos de niñas, niños y adolescentes”.
Justamente por ese rol como organismo proteccional, esa Secretaría de Estado del Poder Ejecutivo Provincial debe adoptar y ejecutar medidas de protección de derechos respecto de niños en situaciones graves de vulnerabilidad y algunas de tales medidas requieren un control de legalidad posterior de parte de los Juzgados de Familia, además de una articulación de todo el seguimiento que requiera el caso. Es por eso que resulta necesario el permanente ajuste y optimización de esa labor coordinada.
Delegación de Comunicación Judicial
Segunda Circunscripción