El Juez Marcelo Barrutia condenó a Néstor Adrián Meyreles y Federico Oscar Valenzuela Campos, ambos integrantes de la Policía de Río Negro, a la pena de dos años de prisión en suspenso, más el doble de inhabilitación -4 años-  para ejercer cargos públicos, (máximo de pena previsto),  como autores penalmente responsables del delito de "Abuso de Autoridad". Esta causa tuvo la tramitación prevista en el anterior Código Procesal Penal, -Ley 2107- por la fecha en que ocurrió el hecho investigado. A este respecto cabe señalar que el Ministerio Público Fiscal imputó a los nombrados el hecho situado entre el día 14 de Julio de 2016 y el 15 del mismo mes y año, oportunidad en que se dio de alta una línea telefónica a nombre de Lucas Muñoz, Oficial de la Policía de Río Negro,  -que en ese momento se encontraba desaparecido-,  sin que ninguna autoridad judicial ordenara o autorizara el alta de la misma. La línea   fue activada en la zona de Catriel, de manera  presencial. De acuerdo a la declaración del propietario del local comercial donde se llevó a cabo esta diligencia, la misma se realizó a solicitud de uno de los imputados. 

En la sentencia también se impusieron   las pautas de conducta previstas en el artículo 27 bis del Código Penal.

 

En el fallo, cuya lectura se realizó en horas del mediodía de hoy, se ha consignado  que ha quedado demostrado, con el detalle de todos los elementos probatorios reunidos en la causa y producidos a lo largo de dos jornadas de debate,  el accionar de ambos imputados, encuadrado en el delito de "Abuso de Autoridad", de acuerdo a lo normado en el artículo 248 inc. 1 del Código Penal. Por caso, el imputado Valenzuela Campos,  no brindó la información de las diligencias realizadas, ni pidió autorización a sus superiores, ello hasta tanto fue llamado a prestar declaración indagatoria. Ambos encartados, señala el fallo, realizaron diligencias que impactaron de manera negativa en el marco de la investigación de la búsqueda del oficial Lucas Muñoz. Asimismo se ha resaltado que se ha causado daño a la familia  Muñoz, al generar expectativas sobre su aparición con vida en cercanías de la provincia de Neuquén.

 Ambos imputados fueron asistidos por defensores particulares, los letrados Gustavo Godoy y Carlos Vila.

 

Luego de la integra lectura de la sentencia, el Juez Barrutia, señaló la importancia del fallo que se daba a conocer, ello,  en contraposición a lo expresado en el alegato por uno de los letrados defensores, quien sostuvo que una condena podría favorecer la falta de colaboración de empleados policiales ante casos similares al investigado. En este sentido el magistrado afirmó , "...Muy por lo contrario, esta sentencia condenatoria apunta a dar un mensaje fundamental a todos los integrantes de las fuerzas policiales, en el sentido que deben cumplir con su función, que es muy delicada, pero siempre debe ser conforme a la ley...." De igual manera, el Juez Barrutia destacó la conducta y profesionalidad de las partes en todas las etapas del proceso