Una de las funciones de los Juzgados de Familia es verificar la necesidad y legalidad de esas medidas excepcionales, porque implican apartar a los niños, niñas y adolescentes de sus familias de origen para resguardarlos de situaciones de riesgo. En algunas ocasiones los niños son alojados en los hogares Caina que pertenecen a la Provincia, pero en otras, son puestos bajo el cuidado de familias cercanas, referentes afectivos o familias que se encuentran inscriptas como Familias Solidarias en la Senaf.
Así, para poder constatar cómo están y cuáles son las condiciones en las que viven, es fundamental que las y los jueces de Familia puedan entrevistarse personalmente con ellos y con las personas adultas que han quedado a cargo de su cuidado. También es indispensable que los y las Defensores de Menores e Incapaces que intervienen en esos procesos judiciales puedan tener el mismo contacto para poder emitir un dictamen que sirva para orientar la decisión que finalmente tome el juez o jueza en cuanto a la legalidad y continuidad de la medida.
A raíz del aislamiento social obligatorio en el marco de la pandemia por el Covid 19, esas entrevistas no pueden realizarse con normalidad, por lo que la titular del Juzgado de Familia, Andrea Tormena, comenzó a implementar videolladadas grupales por Whatsapp para poder ver y escuchar a los niños, niñas y adolescentes.
“Este contexto excepcional de aislamiento nos lleva a trabajar con más ingenio y creatividad, utilizando los recursos que tenemos disponibles para no desatender situaciones urgentes. En los últimos días realizamos tres entrevistas por videollamadas por medidas excepcionales dictadas por la Senaf. Ellos me facilitaron los números telefónicos de las familias con las que se encuentran los chicos y yo formé los grupos de Whatsapp con mi celular, incluyendo en dos de ellos a la Defensora de Menores Elizabeth Quesada, y así fuimos entrevistándonos con los chicos y también con los adultos. De cada comunicación dejé constancias en los respectivos expedientes, con un resumen de todo lo relatado por ellos, y luego fui recibiendo los dictámenes de la Defensora para cada caso, para poder dictar las sentencias que correspondan en cuanto a la legalidad de las medidas”, explicó la jueza Tormena.
En uno de los casos, la video-entrevista fue con dos hermanitos de 11 y 8 años que están viviendo con una familia de referentes afectivos. Otro fue con un adolescente de 15 que está viviendo temporalmente con una familia de referencia y otro con dos hermanitas de 6 y 4 años que viven con una Familia Solidaria.
El objetivo de las comunicaciones fue “controlar jurisdiccionalmente cómo están, cómo se sienten, cómo es su contexto, para poder decidir si pueden o no seguir en esos lugares”, precisó la jueza. Según valoró, “en todos los casos las interacciones fueron muy positivas, porque los chicos se manejan perfectamente bien con los celulares y las videollamadas y por la excelente predisposición de los adultos, con quienes también dialogamos para despejar sus dudas y para saber cómo estaban”.
En el caso de las hermanitas que se encuentran con la Familia Solidaria, luego de dictar la sentencia que legalizó la medida de la Senaf, con dictamen favorable de la Defensora de Menores, la jueza también envió a los adultos responsables un testimonio digital de su sentencia para que las nenas puedas ser rápidamente incorporadas a la obra social de la familia.
Delegación de Comunicación Judicial
Segunda Circunscripción